La participación actuarial es necesaria cuando se consideran cambios en los parámetros y en la estructura del régimen de seguridad social.
Los cambios en los regímenes de seguridad social a menudo encuentran su origen en preocupaciones acerca de la futura sostenibilidad financiera y la actual y futura adecuación de las prestaciones. Las reformas en los programas y en el sistema general pueden ser paramétricas, es decir que afectan los criterios de elegibilidad, el nivel de las prestaciones y la financiación del régimen. Las reformas estructurales son cambios más significativos, en la naturaleza misma de las prestaciones e incluyen la introducción de nuevos regímenes de seguro social, la adopción de nuevas prestaciones (por ejemplo, para cubrir nuevos riesgos) o cambios de otra índole en la naturaleza de las prestaciones (por ejemplo, el cambio de prestaciones definidas a cotizaciones definidas).