FORMACIÓN DE DIPLOMA

Pasión por la formación en materia de seguridad social

FORMACIÓN DE DIPLOMA

Pasión por la formación en materia de seguridad social

Entrevista con François Hiebel, formador de la Escuela Nacional Superior de Seguridad Social (EN3S) de Francia y Director Regional de la URSSAF (organismo encargado de la recaudación de cotizaciones de seguridad social en Francia) para Champagne-Ardenne.

En 2020, el Programa de Formación de Diploma de la Asociación Internacional de la Seguridad Social (AISS) adoptó un formato de aprendizaje en línea a raíz de la pandemia de COVID-19. Entre junio y diciembre se impartieron 14 cursos de formación en línea sobre diversas Directrices de la AISS. En este contexto, la AISS entrevistó a un formador y a tres participantes del curso sobre las Directrices de la AISS sobre los Errores, la Evasión y el Fraude en los Sistemas de Seguridad Social, impartido a través de la plataforma de aprendizaje en línea Digital Campus EN3S a finales de 2020.

 

François Hiebel

¿Cuál es su trayectoria profesional, y cómo y cuándo se convirtió en formador profesional en administración de la seguridad social de la EN3S?

En la EN3S, hace ya casi 30 años, me contagié con un virus del que todavía no me he vacunado: el virus de compartir mis conocimientos sobre los principios fundacionales, la evolución y las ventajas de la seguridad social. A lo largo de mi carrera profesional, siempre he dedicado tiempo a la formación, tanto sobre los aspectos jurídicos de la seguridad social, como sobre los avances en las tecnologías de la información u otros temas relacionados con la gestión de la seguridad social.

Por otra parte, mis responsabilidades profesionales me llevaron a colaborar con URSAFF, red de organismos que se encarga de la recaudación de las cotizaciones de seguridad social en Francia. Actualmente soy el Director Regional de URSAFF para Champagne-Ardenne.

En su opinión, ¿cuáles son las principales ventajas del Programa de Formación de Diploma de la AISS en cuanto al trabajo y desarrollo profesional de los participantes?

En noviembre y diciembre de 2020 impartimos un curso de formación a distancia sobre las Directrices de la AISS sobre los Errores, la Evasión y el Fraude en los Sistemas de Seguridad Social. Entre los 20 participantes, procedentes de 12 instituciones y 10 países diferentes, algunos se estaban iniciando en este ámbito y necesitaban un marco de referencia. Otros contaban con una dilatada experiencia y necesitaban un espacio de intercambio. Todos ellos valoraron muy positivamente la oportunidad de debatir e intercambiar experiencias.

A lo largo del curso de formación nos reunimos todos los jueves por la tarde para las clases en grupo. Tanto los participantes como los formadores esperábamos con impaciencia la siguiente sesión. Los participantes del curso de formación crearon vínculos estrechos que tienen la intención de mantener para seguir reforzando su red. Esto ya se refleja en algunas iniciativas transfronterizas muy concretas.

Su ámbito de especialización son las Directrices de la AISS sobre los Errores, la Evasión y el Fraude en los Sistemas de Seguridad Social. ¿Qué las hace tan interesantes para los estudiantes?

Es difícil considerarlo como un ámbito único, ya que, en realidad, la lucha contra los errores, la evasión y el fraude se basa en principios, métodos y componentes que son transversales y comunes a todas las ramas de la seguridad social. Suelo mencionar un aspecto en particular, que es fundamental y resulta difícil de lograr, puesto que exige toda una estructura y una tecnología de la información de vanguardia; me refiero a la identificación y autenticación de los asegurados y los empleadores.

Nuestros alumnos apreciaron en gran medida la especial atención que se prestó a la importancia de los conocimientos técnicos y su transmisión, así como a las medidas para luchar contra los errores, la evasión y el fraude. El intercambio de conocimientos especializados es esencial para promover la seguridad social, ya que mejora el cumplimiento tanto por parte de los beneficiarios de la protección social, como de quienes la financian mediante cotizaciones. Debemos convencer a estos últimos de que su dinero se aprovecha de la mejor manera posible.

¿Qué opina del actual curso de formación en línea?

Lo que más me llama la atención es la perfecta coordinación entre el paquete de formación que hemos elaborado conjuntamente con la AISS, basado en las Directrices y en el manual de formación, y la gran profesionalidad con que la EN3S lo está impartiendo. De hecho, el Digital Campus EN3S ofrece una gran cantidad de materiales para el aprendizaje autónomo, como vídeos, cuestionarios, palabras clave y consejos prácticos. También hemos organizado sesiones individuales con los participantes, en las que se han realizado diversos ejercicios que les han servido para elaborar sus propios planes de acción de lucha contra los errores, la evasión y el fraude, que posteriormente desarrollarán en sus instituciones. Se trata de un verdadero ejemplo de formación aplicada a la práctica.

El siguiente paso será que las instituciones soliciten a la AISS los servicios de expertos especializados en temas concretos, y tal vez incluso auditorías para evaluar la aplicación de las Directrices.

En su opinión, ¿cuál será el futuro de los cursos de formación profesional en línea después de la COVID-19 en comparación con los cursos presenciales?

Gracias a la EN3S y a la AISS, este es el mejor programa de formación a distancia que he dirigido hasta ahora. En este sentido, hemos mejorado nuestra profesionalidad. Sin embargo, no creo que debamos convertir todas nuestras sesiones de formación presencial en sesiones de formación en línea. Al contrario, conviene utilizar ambas modalidades de forma paralela, según los casos.

Incluso pueden combinarse. Es perfectamente factible impartir a distancia la primera parte de un programa de formación y que la segunda tenga lugar de manera presencial, lo que permitiría a los participantes conocer a expertos de alto nivel y adquirir experiencia sobre el terreno. Esta segunda parte también ayudaría a reforzar los vínculos que se hayan empezado a crear durante las reuniones virtuales y supondría una recompensa por haber completado la formación en línea, que puede ser exigente.